Pasan los segundos, los minutos, las horas y sigo estudiando,
tengo que intentar meter esa información como sea en mi cabeza, el examen es
mañana y me quedan páginas sobre la reproducción de las plantas. Hago un
pequeño descanso, miro el móvil, todo el mundo libre y yo aquí prisionera de la
biología. Al final me paso más tiempo del que debería con el móvil, no me puedo
permitir más distracciones, lo apago y lo aparto de mi vista. Justo cuando me
estoy concentrando, pasa una mosca, es muy graciosa cuando vuela.
Me rindo, estudiar es muy complicado.
Lucía Muniesa
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